La casa-vid

Dentro de un parque eólico de Tenerife, el estudio Ruiz-Larrea construyó esta vivienda explorando las ventajas del cultivo de las vides en un hoyo circular. El sistema, propio de la comarca isleña de La Geria, sirve para proteger la uva del viento y en el caso de un edificio como este, además, para integralo en el paisaje de lava, en lo que se puso más énfasis al aprovechar la piedra volcánica autóctona para su construcción.

El edificio carece de calefacción por las benignas condiciones climáticas. Los muros de doble hoja de piedra volcánica se apoyan directamente en el terreno para que este transmita aire fresco al interior. La cubierta de losa de hormigón con capa vegetal y plantas autóctonas mantiene la húmeda con un sistema de goteo. Además, la casa utiliza la energía de los molinos del parque eólico.