Diálogo con el pinar

En las faldas de Sintra (Portugal), el arquitecto Frederico Valsassina proyectó Casa Banzão II, cuyo encalado y formas simples contrastan llamativamente con el denso pinar. Sin embargo, hay una conexión con la arboleda y el entorno: se encuentra en las contraventanas de basta madera, que se pueden cerrar dejando lisa la fachada, y en una sección de esta que se revistió de la misma piedra que sirve de camino de entrada a la vivienda.

Un patio interior donde se plantó un viejo olivo sirve para ventilar las estancias, decoradas al mínimo y con otro toque de rusticidad visible en los pesados cortinajes hechos, de nuevo, de madera sin tratar. El salón se concibió como una «caja de música», por donde todo pasa. Da a la entrada, al patio y al jardín con vistas a la montaña, donde se despliega una piscina conectada a la casa por tablones de madera.