Directa al agua

La Villa Storingavika, del estudio Saunders, se rodea de un paisaje de fiordos de enorme belleza, que dentean la costa de Bergen, en Noruega. Lo hace con un estilo moderno y funcional, priorizando esa confortabilidad tan escandinava. 

Revestida con madera teñida de negro y luego con madera de cedro, más clara, la vivienda es una estructura larga y delgada, con un balcón apoyado en tres postes de acero que se lanza hacia el agua. La visión del mar también es la protagonista dentro, lo que se subrayó pintando las paredes de blanco nacarado. El piso superior es para los padres y el inferior, para sus dos hijos universitarios. Además, cuenta con un pequeño estudio para invitados de 35m2 en la planta baja.